sábado, marzo 28, 2020

12 dias de cuarentena

Si fuera poeta, tendria en este momento un cuaderno lleno de versos y sonetos tristes; si fuera compositora, habria añadido canciones de amor y despedidas a mi repertorio, pero soy un simple ser humano, que se quiebra 2 veces por dia, y no por el hecho de estar confinada entre las cuatro paredes de la casa, no es queja, me quiebro porque el mundo con el que soñé allá afuera, se está resquebrajando por completo.

Dicen que los planes de Dios son perfectos, y no lo dudo, somos nosotros los imperfectos que no aprendemos aún a tener paciencia y a confiar. Tal vez el mundo que venga será mejor, no lo sé. Pero a pesar de que siempre me he considerado una optimista empedernida, hoy no me siento como tal. 

Como duele la noticia de esas personas queridas que se van, a las cuales no les puedes dar un ultimo adios, como duele no poder abrazar a sus familias para darles consuelo, y sobre todo, como duele no poder ir a abrazar a los vivos, a tus seres queridos, porque no es hasta que pasan estos eventos que uno no entiende la miserable particula que representamos en el universo, seres totalmente inconcientes y a la deriva de cualquier fuerza mayor, minusculos por completo.

Y solo ahi, con ese temor de enfrentar a la muerte sin previo aviso, es que uno comienza a aprender a agradecer, por esta vida, con sus altos y bajos, que ha sido en recuento una muy buena vida. Agradecer por lo aprendido, por lo vivido, por lo reido y lo llorado. Y a darse cuenta de la relatividad de las cosas y de la forma en que desperdiciamos el tiempo en quejas o enojos, que rebotan contra la pared y nos golpean en la cara, una y otra vez.

Llevo dias quebrada pero mantengo siempre la esperanza de que cuando todo esto pase, la luz del dia sera mas brillante, los encuentros mas significativos y nuestras prioridades mas sensatas.

Los abrazo con el alma y a la distancia.

PD: gracias por todo abuelo Wilson, te vamos a extrañar.


sábado, marzo 21, 2020

En epocas de cuarentena

En cuestion de 6 dias he pasado por una montaña rusa de emociones, primero el estado de alerta por saber que algo sobre lo cual no tengo en absoluto control venia, luego la preocupacion por no saber por donde empezar, entonces me dedique a limpiar - lavar - desinfectar en un loop infinito durante un par de dias, luego la rabia de tener que lidiar con mi señora santa madrecita, que al creerse inmortal, pretendia salir de la casa por cualquier excusa y veran, al final si ella viviera sola ya fuera su decision, pero estoy aqui yo sola (como adulto responsable) a cargo de ella (3era edad) y mi hijo de 9 años. Luego tristeza e incertidumbre, no siempre puedo pretender ser una mujer fuerte a la que no le afectan las emociones, la verdad es que me afectan, y mucho.

En este momento, he encontrado un poco mas de equilibrio entre el trabajo de casa y el que debo realizar para la oficina, he conversado con amigas, he leido un monton y me encuentro bastante mas tranquila. Supongo que mis niveles de ansiedad tambien iran subiendo conforme se vayan agotando las provisiones, pero eso es un problema que dejare para la Stefania del futuro, no hay mucho que yo pueda hacer por el momento.

Como todas las cosas de la vida, hasta los peores escenarios tienen un lado luminoso, y el mio ha sido hasta el momento poder descansar mejor, poder alimentarme mejor, adelantar un monton de trabajo de la casa asi como el de la oficina sin tener interrupciones casa 5 minutos. Esta cantidad de silencio me ha obligado a pensar, a meditar mucho y a cuestionarme, si lo que estoy haciendo ahora es lo que pretendo hacer el resto de mi vida. Aun no tengo la respuesta, pero al menos ya he logrado plantearme la pregunta. 

Hoy todo sigue viendose de cabeza, lejano y distante. Hoy pesa mucho la forma de ser de cada individuo para afrontar las adversidades. Es un poco ironico que esta pandemia nos este obligando a trabajar de forma personal pero con un objetivo comun. Aqui ya no vale si tu ego es mas grande que el mio, o si tu tienes mas amigos de la alta sociedad que yo. Aqui lo que va a importar realmente seran nuestras decisiones diarias y que entendamos como estas afectan no solo a los que nos rodean sino que tienen un efecto de onda a nuestro alrededor.

Tiempo de reflexion y de cambio obligatorio.

Quedense en casa y agradezcan a diario por el milagro de la vida.

Un abrazo.