jueves, noviembre 18, 2010

los zapatitos morados

El niño corría tan rápido por la calle, que sus zapatitos azules con rayas rojas se veían morados a la distancia.
Hace mucho tiempo no veía tanta felicidad y tanta magia en algo tan sencillo!

lunes, noviembre 08, 2010

La Suite de Yaku

(Escribo esto, porque MUERO del hambre, pero a estas alturas del dia prefiero esperar media hora mas y almorzar decentemente antes que comer uno de esos pastelitos insalubres sin registro sanitario de los kioskitos de abajo.)

Yaku piensa, que la suite no esta nada mal. Aunque extraña en cierto modo los incesantes acosos del perro vaca (a.k.a. Bosé), por primera vez en 2 años se siente libre de andar a sus anchas y tiene la seguridad de que nadie mas se come su comida o se bebe el agua de su platito.

Tiene una cama MAS grande que la que tenia antes (yeah!), tiene un nuevo papá al que cargarsele, claro aparte tiene su canastita que casi siempre le resulta muy cómoda aunque nunca es su primera elección. Y tiene por el momento muchos lugares y sonidos nuevos que explorar.

Lo que no entiende él es, ¿por qué no puede salir libremente por las noches como lo hacía en su otra casa?.

-"Bueno Yaku te lo explicaré una vez más: desde aquí donde estas viviendo ahora, por más que camines, no vas a encontrar tu antigua casa, está demasiado lejos. Hay otros perros y gatos que no son los mismos con quienes aprendiste a convivir en tu otro barrio. Y como si faltara menos, hay gente loca que te puede estar viendo guapo y a la que no le importará separarte de tu familia y no se tomará la molestia de devolverte simplemente porque te ven "bonito" y "costoso".

Así que no Yaku lo siento, no te puedo dejar salir porque no puedo soportar que te desaparezcas otra vez durante una semana."

Yaku me mira pensativo y quizá un poco rencoroso, el entiende lo que le estoy diciendo y comparte mi preocupación, pero aún no le convence la falta de libertad nocturna. Así que para no perder la costumbre, todas las noches seguirá intentando escalar por las mismas ventanas y abrir las mismas mallas esperando que en un descuido hayamos dejado alguna sin cerrar y el pueda irse a dar un paseito por la cuadra.

¿Qué?¿Ustedes no hablan con sus gatos?

;)